Una dieta adecuada después de la FIV (fecundación in vitro) permite minimizar las molestias que pueden aparecer después de la punción, reducir el riesgo de hiperestimulación ovárica y conseguir un aporte adecuado de nutrientes en la fase de implantación embrionaria.
Diferencias entre la dieta después de la FIV y una dieta normal
Según las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) una dieta equilibrada debe contener las siguientes proporciones: 15% de proteínas, 30% de lípidos y 50% de hidratos de carbono. Sin embargo, cuando elaboramos una dieta para después de la FIV, estos porcentajes deben variar, aumentando la ingesta de proteínas. Un ejemplo podría ser el siguiente: 25% de proteínas, 58% de hidratos de carbono y 17% de lípidos. También es importante incrementar el aporte de fibra, pasando de unos 20g al día, para una dieta de 1.500 kcal, a unos 40g diarios.
Importancia de las proteínas en la dieta después de la FIV
Un aumento de la ingesta de proteínas debe de estar en la dieta después de la FIV para contrarrestar los efectos de la hiperestimulación ovárica. Después de la administración de hCG (Ovitrelle®), para conseguir la maduración final de los ovocitos previo a la punción, se produce un fenómeno de acumulación de líquidos dentro de la cavidad abdominal como consecuencia de una mayor permeabilidad en los vasos sanguíneos. Además de este «escape de líquido» fuera de los vasos, también se produce una salida de proteínas. El aumento de la ingesta de proteínas en la dieta después de la FIV contrarresta este efecto al traducirse en un incremento de proteínas en el torrente sanguíneo, y esto a su vez, consigue retener el “escape de líquido”, y hace que la mujer tenga una menor hinchazón abdominal.
Ingesta de líquidos tras la FIV
El consumo de líquidos ideal en la dieta para después de la FIV debe de estar entre 1 y 1.5 litros diarios, para reducir la retención de líquidos. No es recomendable una ingesta inferior a un litro al día ya que podría provocar deshidratación en la paciente. Lo ideal es el consumo de bebidas isotónicas (que llevan una mayor concentración de sodio), y no agua, porque, como consecuencia del aumento de la permeabilidad vascular, la concentración sanguínea de sodio puede bajar.
Papel de la fibra en la dieta después de la FIV
Si bien la fibra juega un papel fundamental en la nutrición, en la dieta para después de la FIV este elemento debe de estar aún más presente. Después de la punción folicular, las pacientes de fecundación in vitro reciben un suplemento de progesterona para ayudar a la maduración del endometrio y prepararlo para la implantación del embrión. Pero, aparte de este efecto, la progesterona reduce la contracción del músculo liso, que es el tipo de músculo que tienen las asas intestinales. Esto hace que el intestino se mueva más despacio y que las pacientes tengan más tendencia al estreñimiento. Por este motivo es importante incrementar el consumo de fibra en la dieta.
URH García del Real, como parte del Instituto de Medicina EGR, cuenta con una unidad de nutrición que ofrece asesoramiento a todos nuestros pacientes en una primera consulta de nutrición de forma gratuita. Además, nuestra dietista-nutricionista, ha elaborado una «dieta tipo» para ayudar a todas las pacientes de FIV a cumplir con estos requerimientos nutricionales de forma sencilla.
Si quieres conocer más datos sobre la dieta para después de la FIV o sobre recomendaciones nutricionales para mejorar tu fertilidad, puedes pedir cita con nosotros de forma gratuita y sin compromiso o llamando al teléfono 91 740 16 90. ¡Nuestro objetivo es ayudarte a cumplir tu sueño!
Dra. Sylvia Fernández-Shaw Zulueta – Directora de URH García del Real
M. Teresa Hernández García – Dietista-Nutricionista